1/2 Kg. de mollejas de pollo
1 cebolla
1 pimiento rojo
2 dientes de ajo
250 ml. de cerveza
250 ml. de salsa de tomate
250 ml. de agua
1 cucharada de harina
1 hoja de laurel
1 pastilla de caldo concentrado de ave
Sal
Pimienta negra
1 cucharadita de tomillo seco
Aceite de oliva
Champiñones salteados con ajo y perejil (opcional)
Aunque las mollejas de pollo suelen venderse limpias, es bueno que en casa les des un buen lavado en agua con un chorro de vinagre y las enjuagues al final para quitarle el sabor a vinagre.
Una vez limpias las mollejas, dóralas en la olla con una generosa cantidad de aceite de oliva. Una vez doradas, retíralas y reserva.
En el mismo aceite, pochamos la cebolla junto con el ajo y el pimiento, todo ello cortado en trozos y, una vez que hayan cogido color, agrega la harina y remueve.
Una vez que la harina se ha dorado, vierte la cerveza, remueve y sube el fuego.
Incorpora a la olla el resto de ingredientes; las mollejas de pollo, la salsa de tomate, el tomillo, la pastilla de caldo concentrado, el laurel, el agua y sal y pimienta al gusto.
Este es el momento de cerrar la olla y dejar que cueza unos 30 minutos... Listas, sólo te queda abrir la olla y mojar pan, ya que las mollejas de pollo con salsa de cerveza son una auténtica delicia.
Nota del autor
Las mollejas de pollo son duras, por eso las he cocido en la olla rápida. Si las cueces en cazuela u olla convencional, el tiempo de cocción y la cantidad de agua, deberán ser aumentados considerablemente (como unos 90 minutos más o menos y el agua se puede ir añadiendo según la vaya necesitando).
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